- Sin Miedo al Éxito
- Posts
- ¿Sabes cómo salirte de ese proyecto?
¿Sabes cómo salirte de ese proyecto?
No basta con saber entrar...
¿Tienes una estrategia de salida?
Hoy quiero tocar uno de los conceptos que más se repitió en el periodo de pandemia, y que al parecer perdura hasta hoy, porque cada día más se ven más empresas y empresarios en este dilema.
Conceptos como la reorganización, quiebra, sindico, y otros, los escucho todos los días y vemos, como no importando el tamaño, industria ni capital con que cuentes, muchos negocios van directamente a la quiebra sin mediar resistencia alguna.
Hablo de grandes empresas de retail, aerolíneas, fast food, entre otras. Si esto les sucede a grandes compañías, que se puede esperar para empresas o negocios más pequeños o familiares, muchos de ellos, atendidos por sus propios dueños. Muchos de ellos, negocios que son el sustento del día a día, mes a mes de uno persona o grupos de familias completas.
Primer Aprendizaje
Para comenzar un negocio no basta con tener una buena idea, un producto/servicio interesante, o un capital importante, el hacer negocios requiere de un conjunto de decisiones y acciones previas que visualicen aspectos que hoy lo más probable no están en el radar, pero puedo decir con un alto grado de certeza que si lo estarán mañana.
Sin querer utilizar la pandemia como respaldo del tema (ya que fue un caso muy extraordinario para esta época), creo que ejemplifica muy bien, las sorpresas con las cuales nos podemos enfrentar de un minuto a otro. Cuando nos íbamos a imaginar que en pleno siglo XXI, con cada día más startups y empresas enfocadas en el desarrollo de inteligencia artificial, con más empresas desarrollando nuevas tecnologías de la información, íbamos a tener que estar todos encerrados en nuestras casas, imposibilitados de poder salir y pero aún de poder relacionarnos con nuestros afectos más cercanos. Esto, que no estaba en el radar de nadie, y estoy seguro, que menos en el inicio y planificación de un negocio.
Sé que es una situación extrema, pero bájale dos puntos a esta historia real, y llévala a tu negocio, para permitir visualizar los riesgos y situaciones probables que casi seguro vas a enfrentar.
Hace unos días atrás escuche de una pareja que conozco, los cuales hace un par de semanas tenían una vida envidiable como la hubieran querido muchas personas, esta vida incluía una casa fantástica en uno de los mejores barrios de la ciudad, autos último modelo a la puerta, hijos en colegios privados de lo mejor que hay en la ciudad, vacaciones a elección, sin embargo, hoy se veían tomando una de las decisiones más difíciles que alguien puede tomar, dejar su hogar y decidir cambiar de ciudad e irse a vivir con uno de los padres de la pareja, debido a que él había sido despedido de su trabajo y por lo tanto, no podrían seguir costeando la “maravillosa vida” que llevaban.
Escuchando a esta persona, reflexionaba, ellos como tanto otros, habrán pensado en algún momento cuando compraron o arrendaron, cuando decidieron el colegio al cual iban a ingresar a sus hijas, o bien cuando vivían y “disfrutaban” inconscientemente del mes a mes, que en algún minuto podía suceder algo, como por ejemplo que fueran desvinculados de la empresa donde trabajaba alguno de los dos (lo cual sucede diariamente y siendo sinceros es algo que le puede suceder a cualquiera).
NO!, porque no tenían un plan de salida! o lo que algunos llaman plan de contingencia.
Segundo Aprendizaje
Si vives el día a día, sin proyectar una posible situación de desempleo (en el caso de ser dependiente), o de mala inversión (en el caso de ser empresario), debes preocuparte. La vida y los negocios están completos de imponderables económicos.
Por este motivo, debemos y tenemos la responsabilidad con nosotros mismos y nuestra familia de ser conscientes, no sólo en tu negocio o empresa en que trabajas, o en tu negocio, sino también en tu vida, ¿Cuentas con una estrategia de salida?, cuando las cosas comiencen a salir al revés de lo que creíste o pensaste.
Mientras escribo estas líneas, se viene a mi mente los recuerdos vividos de algunos hechos relacionados con mi historia de negocios, que, a decir verdad, han sido varios: Tecnología, Joyería, Ropa y Accesorios, Head Hunter, Iluminación y Consultoría. Todas ellas, han sido algunas de las industrias donde he hecho algún negocio, todos con diferentes socios y diferentes capitales invertidos. Algunos de ellos muy exitosos, no sólo en dinero, sino de aprendizaje, y otros definitivamente con resultados bien diferentes a los que había imaginado en sus inicios.
Quiero compartir algunas de mis historias, que creo, ayudará a entender mejor porque es tan importante tener una estrategia de salida. Una de las historias más “entretenidas” (como todas, contadas años después de que sucedieron) comenzó por allá por el año 2007 cuando a mi hermano mayor le ofrecieron una muy buena posibilidad de trabajo en México, más explícitamente en Ciudad de México, como alto ejecutivo de una compañía chilena, que quería desarrollar y ampliar su negocio en ese país. Al poco andar, y de viaje en viaje conociendo el país y las ciudades, se encontró con la ciudad de Taxco, ubicada al suroeste de Ciudad de México y reconocida internacionalmente por la fabricación de joyas de plata. Mi familia por el lado de mi madre tenía una vasta experiencia en joyería. Por este motivo, mi hermano mayor un día me comenta que esta la posibilidad de que un artesano de Taxco nos fabrique joyas y nosotros las importamos, se las pasamos a mamá y ella las vende. Distribuimos las ganancias y ganamos plata, todo muy simple y fácil diría yo, para lo que vendría después.
Definimos los diseños, armamos un catálogo de primer nivel y pedimos la primera partida, llego todo bien, vendimos todo y estábamos todos felices. Como siempre he pensado en grande (la diferencia es que antes no tenía los conocimientos ni sabia como se hacía para alcanzar a ser grande), contacte a una empresa de supermercados a domicilio (Telemercados Europa), quienes tenían un catálogo con productos que las personas que compraban la mercadería (en su mayoría mujeres en ese tiempo) podían canjear productos del catálogo con los puntos que iban acumulando con sus compras. Así fue como armamos un pedido, luego un segundo, y luego un tercero con cantidades cada vez más grandes, pero nos olvidamos de que estábamos tratando con un artesano, que poco o nada sabia de negocios, importaciones, lead time, y contratos.
Y paso lo que era obvio (mirando hoy hacia atrás), el artesano fallo en la entrega, desapareció del mapa por semanas, y no pudimos completar y cumplir con los compromisos adquiridos, finalmente y a los pocos meses después, las multas nos “comieron”, ¡¡y decidimos no continuar con el negocio porque no había más presupuesto y obviamente!!
¡NO TENIAMOS PLAN DE SALIDA!
Tercer Aprendizaje
Aprendí la importancia de hacerse mejores y más profundas preguntas al iniciar un negocio y a veces en la vida también. Esto es un ahorro gigante de tiempo, recursos y paz en el futuro. El preguntarse, ¿Qué pasaría si no resulta como lo planee?, ¿Qué pasaría si no vendo en el lugar que tenía planeado o al cliente que tenía definido?, ¿En qué está la industria en que estoy ingresando?, ¿Qué tipo de leyes afectan a mi negocio? son esenciales para construir una estrategia de salida pensada con anticipación.
Muchas veces uno escucha el comentario “el Excel da para mucho”, es verdad, pero más verdad es que el Excel ve números, y los negocios como la vida, muchas veces se caen, no por los números, sino por tu socio(a) / pareja, por problemas legales, porque la industria en que te estabas metiendo iba para otro lado, por no tener el flujo de caja para soportar tanta venta, o porque paso algo que no lo tenías en tu radar, y no estabas preparado para aquello.
Cuando hoy, asesoro a empresarios, evalúo un negocio o si decidiera iniciar un negocio, lo expondría a la mayor cantidad de personas posibles, a la mayor cantidad de expertos y especialistas en el área donde tengo pensado ingresar, pagaría un buen abogado que me asesorara y revisara todo los temas legales, analizaría hacia dónde va industria, no confiaría en promesas por más cercanas que sean, y tendría una estrategia de salida planificada, para estar preparado, cuando suceda lo que tiene altas probabilidades de suceder!! (aunque no lo creas), que puede acabar con tu sueño y tu negocio, pero lo más importante puede arruinarte a ti y a tu familia de paso.
Define tu estrategia de salida hoy, para evitar un desastre mañana.
¡Un Abrazo!
Rodrigo Cornú C.
Siempre puedes pasarte a premium. La próxima semana tendremos un podcast exclusivo para nuestros suscriptores premium y material para potenciar sus proyectos y resultados.
Si te gusta este contenido pásate a Premium en el siguiente botón y comparte este correo a quien creas que le puede servir.